Alcaldes y concejales del PSOE de la comarca de Molina denuncian el acoso del PP contra quienes protestan

14 Abr 2014

Pablo Bellido

Alcaldes y concejales del PSOE de la comarca de Molina denuncian el acoso del PP contra quienes protestan

14 Abr 2014

Pablo Bellido

Alcaldes y concejales del PSOE de la comarca de Molina denuncian el acoso del PP contra quienes protestan

14 Abr 2014

Pablo Bellido

El último episodio se ha producido tras la polémica visita de Cospedal en enero, pero ya ocurrió con motivo del intento de cierre de las urgencias

Alcaldes y concejales del PSOE de la comarca de Molina han mantenido este fin de semana una reunión de trabajo con la dirección provincial de este partido, en la que decidieron por unanimidad denunciar el acoso que están sufriendo tanto cargos públicos como representantes vecinales por parte de las administraciones gobernadas por el PP. “Se están utilizando las instituciones para perseguir de manera absolutamente sectaria a quienes solamente hacen uso de su libertad y ejercen el derecho a protestar contra el deterioro de los servicios públicos que están sufriendo”, ha afirmado el secretario provincial del PSOE, Pablo Bellido.

Así ha ocurrido recientemente, después de que la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, fuera a Molina el pasado mes de enero en medio de un despliegue policial sin precedentes; pero también ocurrió antes, con motivo de las protestas contra el cierre de los servicios de urgencias. “El PP quiere encadenar a los ciudadanos que osan protestar para ocultar que Cospedal no puede dar un paso sin sentir el rechazo de los castellano-manchegos”, ha agregado Bellido.

La reunión sirvió también para analizar con detalle los recortes que ha sufrido la comarca desde que gobiernan Cospedal y Rajoy, que se han traducido en pérdida de calidad de vida y de puestos de trabajo en una zona especialmente necesitada del apoyo de las administraciones. Al cierre de escuelas, oficinas agrarias y centros interpretación turística, eliminación de comedores y rutas de transporte escolar, reducción drástica de servicios sanitarios y sociales, todo ello acompañado por el despido de más de trabajadores públicos, se ha unido también la mutilación del parador de turismo, que no solo va a perder habitaciones, sino que también puede quedar desprovisto de los elementos de ocio diferenciadores que más iban a contribuir a hacerlo rentable, como el “spa” y la piscina cubierta.

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