Caballero - en referencia a De Cospedal- asegura que “algunas han entrado en vacaciones” desde la toma en consideración en el Congreso de nuestro Estatuto

El viceportavoz del grupo socialista en las Cortes, José Manuel Caballero, ha dicho hoy que para acabar con el trasvase Tajo-Segura «en los términos en que se concibe hoy» hay dos vías: una la recogida en la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha y otra garantizado unos niveles en la cabecera del Tajo y a lo largo de su cauce superiores a los que hay ahora.

Caballero respondía así a preguntas de los periodistas sobre las declaraciones que ayer hizo el presidente de la Junta, José María Barreda, sobre que se están negociando alternativas al final del trasvase Tajo-Segura en 2015 que figura en una disposición de la propuesta de reforma del Estatuto que se está tramitando en el Congreso.

José Manuel Caballero ha dicho que negociar es una responsabilidad del Gobierno y de los grupos parlamentarios, algo que ha afirmado están haciendo el Ejecutivo regional y el PSOE, aunque «nos cabe duda de qué está haciendo el PP».

En su opinión, «algunos y algunas han entrado en vacaciones» tras la toma en consideración del texto estatutario en la Cámara Baja.

El viceportavoz del grupo socialista ha indicado que Barreda tiene muy claro que hay que acabar con el trasvase «en los términos en que se concibe hoy», para lo cual, según Caballero, hay dos vías.

Una es la que está formulada en la propuesta de reforma del Estatuto y la otra, que «no descartamos», es que se pueda establecer una reserva estratégica para atender las necesidades actuales y futuras de Castilla-La Mancha, además que se aumente el nivel de los pantanos de cabecera a partir del cuál no es posible trasvasar y que en el cauce del río discurra una cantidad de metros cúbicos por segundo superior a la que pasa ahora.

«De esta manera se acaba igual con el trasvase», ha asegurado Caballero, que ha afirmado que el PSOE de Castilla-La Mancha no está en contra del trasvase «per sé» o porque sea una obra franquista, sino porque «el poco agua que hay para atender los intereses de Castilla-La Mancha se va por el trasvase».

Caballero ha demandado al PP un «esfuerzo» para que en los ayuntamientos de la región se puedan aprobar mociones conjuntas en defensa del Estatuto y ha criticado que la portavoz regional del PP, Carmen Riolobos, pidiera ayer a los socialistas la «adhesión inquebrantable» a la que van a presentar ellos.

Ha afirmado que la expresión utilizada por Riolobos recuerda a «otros tiempos, a otros movimientos», y ha dicho que por parte del PSOE «adhesiones inquebrantables ninguna. Eso lo dejamos para la Falange».

El también secretario regional de Organización del PSOE ha agregado que «algunos nos estamos empezando a cansar de la actitud del PP», pues «hemos tendido la mano permanentemente para que no se suelte la presidenta del PP» en la región, María Dolores de Cospedal, de la «defensa de los intereses de Castilla-La Mancha».

No obstante, ha advertido al PP que «no vamos a seguir poniendo la mano para que nos la muerdan» y ha recordado que el PSOE gobierna en más de 530 ayuntamientos de la comunidad autónoma, que suman el doble de población que los gobernados por el PP.

Así, ha dicho que si el PSOE ha pedido el apoyo del PP a su moción en defensa del Estatuto, «no es por debilidad», sino porque lo que da fuerza a la posición de Castilla-La Mancha fuera es la unión del PSOE y del PP.

Caballero ha recordado al PP que es «complicado» y «difícil» sacar la propuesta de reforma del Estatuto, pues «enfrente hay adversarios organizados capaces de ponerse de acuerdo para defender sus intereses», y ha añadido que si el PP no quiere pactar las mociones en defensa de la reforma estatutaria, «no las vamos a pactar».